Empezando una rutina de ejercicios
Ya sea que siempre hayas tenido algún tipo de rutina de ejercicios, y que recientemente te hayas encontrado necesitando mover un poco el cuerpo o quizás hayas deseado incorporar una rutina de ejercicios en tu vida, es menester descubrir cuándo, dónde y cómo te ejercitarás. Porque son algunos de los desafíos que tendrás si comienzas a hacerlo.
Y enfrentarlo con alegría debería ser un deber, porque es muy saludable y tu cuerpo y mente, te lo agradecerán.
Yo misma me he ejercitado con regularidad, durante la mayor parte de mi vida adulta. Obviamente, ha habido períodos prolongados de tiempo, durante los cuales el ejercicio ha pasado a un segundo plano. Pero, en su mayor parte, me las he arreglado para encajar porque me despeja la mente.
La clave es encontrar el equilibrio
Cuando la vida es simple y sencilla, puede ser fácil dedicar varias horas a la semana a hacer ejercicio. No obstante, esas fases no parecen durar mucho, porque muchas veces pongo excusas por trabajar tanto.
Aún así, definitivamente es posible incorporar el ejercicio en tus días diarios, incluso cuando tienes poco tiempo y / o energía, y te garantizo que te sentirás mucho mejor anímica y físicamente.
Mantente activa
Cuando tenía dos trabajos a la vez, hacía ejercicio siempre para mantenerme activa. En ambas ocasiones, estaba embarazada de mis hijas, y lidiaba con terribles náuseas matutinas y dolor ciático amén de ir a cada rato al baño a orinar.
Y cuando tuve a mis bebas, hice ejercicio antes, durante y después del parto.
Ahora que estoy ocupada trabajando desde casa, gestionando y compaginando mi carrera independiente entre lo de coaching de vida y ejecutivo empresarial, lo de copywriter y dar idiomas sumado a los talleres para mujeres maduras, trato de hacerme un momento en mi agenda para hacer ejercicios.
Hacerte tiempo para la actividad
No me estoy jactando. Hacerme tiempo para hacer ejercicios es un desafío. He tenido que obligarme a levantarme y ponerme en movimiento más veces de las que puedo contar, les aseguro. Tuve que dejar las rutinas y reiniciar otras nuevas una y otra vez mientras miraba un vídeo de una entrenadora.
Entrenamiento de pocos minutos
He tenido que conformarme con entrenamientos de 10 minutos aquí y allá, y han pasado muchas semanas, no podía ni quería hacer ejercicio en absoluto, es la verdad. Pero, siempre me digo a mí misma que hacer algo es mejor que nada, y realmente lo es.
Aquí hay algunas formas en las que puedes incorporar el acondicionamiento físico a tu vida, incluso cuando parezca abrumador.
Mezcla movimiento en tu día
Si estás comenzando desde el principio, nunca has hecho mucho ejercicio o ha pasado mucho tiempo desde que lo hiciste, comienza de a poco.
Realiza caminatas cortas y enérgicas todos los días o incluso solo varios días a la semana, usa las escaleras en lugar del ascensor, estaciona el coche en un lugar más alejado del centro comercial o de un parque.
Concéntrate en moverte
Solo concéntrate en moverte más durante un tiempo para que tus músculos, incluido el corazón, puedan sentir que tu cuerpo se mueve y que no se sorprendan tus músculos y tendones por este cambio repentino de movimiento.
Usar rastreador de ejercicios
Me encanta, en mi caso, usar un rastreador de ejercicios para realizar un seguimiento de los pasos diarios y los minutos de actividad que realizo.
El objetivo de pasos diario, recomendado suele estar entre 10.000 y 12.000, pero la mayoría de las personas no se acercan a esa cantidad. Ojo, al principio cuesta.
Yo bajo a los Jardines del Turia en las mañanas y veo mucha gente caminando o corriendo, pero yo correr, en este momento, es como que no tengo resistencia. Por lo tanto, camino aproximadamente 30 minutos de ida y 30 minutos de vuelta.
Intenta rastrear tu norma durante unos días. Y, una vez que veas cuál es tu promedio habitual, aumenta desde allí.
Por ejemplo: si después de unos días de vida normal. ves que normalmente das alrededor de 3500 pasos por día, comienza con una meta de 5000.
Empiece poco a poco, pero sé intencional
Cuando mis hijas eran más pequeñas y yo no tenía una membresía en el gimnasio, incorporaba pequeños ejercicios en cada día, por ejemplo: caminando en el lugar mientras lavaba los platos, haciendo sentadillas mientras los guardaba, enrollando las bolsas de la compra mientras traía a ellas de la escuela, tener fiestas de baile en la sala de estar con ellas, me divertía a mi y a mis hijas, pues era una manera de jugar con ellas.
En aquel momento, no me podía permitir ir al gimnasio, pues éramos jóvenes y todo nos costaba. Lo único bueno, era que teníamos nuestra casa propia. Hasta que nos vinimos a España y entonces, todo cambió.
Estas, son cosas que cualquiera puede hacer en cualquier momento del día para ayudar a desarrollar fuerza y resistencia, incluso cuando no dispones de mucho tiempo.
Elije un horario que te convenga
Obligarte a despertarte a las 5 a.m. o permanecer despierta hasta la medianoche, simplemente no funciona para la mayoría de las personas, al menos no a largo plazo.
No soy una persona super matutina, por lo que normalmente hago mis entrenamientos en casa por la media mañana, una horas antes de empezar a trabajar en mi oficina después de una ducha y desayuno.
Pero, para algunas personas, si no sucede por la mañana, no sucederá en absoluto. Te lo digo yo por experiencia.
Decide siempre y agéndalo cuándo te sientas mejor y comprométete a hacer un entrenamiento corto durante ese tiempo, al menos unos días a la semana.
Utilizar recursos modernos
Una de las cosas más maravillosas y útiles que surgen de Internet y las redes sociales, es la abundancia de recursos de fitness y gym absolutamente gratuitos, que ahora son accesibles para cualquier persona con una conexión a Internet. Y eso es lo que hago yo. También en Canal De Casa.
En Canal YouTube, hay innumerables de canales dedicados a ofrecer clases de ejercicios de rutina gratuitas a los usuarios, te aconsejo que pongas en el buscador y el que más te agrade, comienzas con esa instructora o instructor.
Puedes encontrar de todo, desde prácticas de yoga de 10 minutos hasta clases de cardio dance de una hora o zumba, todo en un solo lugar, para que puedas hacer exactamente lo que funciona mejor para el tiempo que tienes y lo que tu cuerpo necesite.
Busca en Google Play
También, hay un montón de aplicaciones gratuitas, y de pago tanto en la App Store de Apple como en Google Play, que ponen una gran variedad de programas de acondicionamiento físico al alcance de tu mano.
Personalmente, me encantan las aplicaciones que me brindan entrenamientos rápidos y completos para hacer los ejercicios cuando tengo prisa.
Únete a una clase de ejercicios
Algunas de nosotras, realmente necesitamos responsabilidad cuando se trata de hacer ejercicio.
Participar en una clase o clases de acondicionamiento físico, es una excelente manera de conectarse con otras personas, que probablemente lo reconozcan y se registren cuando lo vean.
Si no te preocupa decepcionarte al saltarte un entrenamiento, es posible que te preocupe que otra persona se dé cuenta de que te saliste de la clase. Eso queda en ti. Yo cuando me he ido, listo. Ni me preocupa qué dirán.
Las clases de acondicionamiento físico, también son excelentes, porque no tienes que planear nada más que llegar allí personalmente en un gym o bien vía vídeos.
¡Funciona!
Conviértelo en un hábito. Independientemente de lo que decidas hacer y de cómo decidas hacerlo, comprométete a hacerlo el tiempo suficiente para formar un hábito o sea 21 días seguidos.
Un par de veces al año, me gusta comprometerme con un desafío de acondicionamiento físico de treinta días; a veces es pilates, sentadillas, abdominales o zumba que me encanta.
Conclusión
Te digo, no se trata realmente de querer ser más flexible o tonificar los abdominales, se trata de hacer algo con regularidad porque eventualmente, una comienza a sentirse como una parte normal e incluso necesaria de la rutina diaria.
Después de un mes de hacer algo a diario, y no hacerlo, comenzas a sentirte mal y tu rutina diaria, se sentirá incompleta.
Preguntas
Ahora bien, ¿Decidiste a empezar al menos a caminar 30 minutos diarios para sentirte bien? ¿Crees que si no tienes motivación, no funcionaría? ¿Qué es lo que te detiene o quizás abandonarías este plan de mover tu cuerpo?
Espero tu respuesta en comentario y si crees que alguna otra persona quisiera una motivación, comparte este post. También puedes escribirme privadamente a: contacto.glamouretstyle@gmail.com