Siempre poniendo excusas
Hay mujeres que ponen excusas para todo, una de ellas es llevar una dieta sana y hacer ejercicios. Conozco muchas mujeres que dicen: «el lunes empiezo», «el mes que viene me apuntaré al gym», «este año, haré gimnasia todo el año», «si, tendría que hacer ejercicios» y la lista sigue.
Y es que no escarmentamos, que el sedentarismo, te endurece y encima te trae males a la salud. Pero ese es un punto de vista…
«Adiós excusas, hola dolor, sudor y resultados»
Sé que da pereza hacer una rutina de ir dos o tres veces a la semana o bien todos los días a un gimnasio, hacerlo en tu casa o al aire libre. Algunas mujeres procrastinan y otras se pasan de la raya. No porque hagas todos los días gym vas a estar genial. Al cuerpo hay que darle lo que necesita, no exigir.
Tampoco es para que te castigues
Entiendo que muchas, se sienten bien haciendo todo el tiempo gimnasia. Tampoco es el hecho de comer de todo en proporciones grandes y luego te mates en el gimnasio haciendo abdominales o corriendo en la cinta. Todo en su medida y a tu ritmo.
Cuando vine a España y fui al gimnasio del Centro Deportivo de mi barrio, que te permite pagar una cuota considerable el ayuntamiento, me sorprendí. No estaba acostumbrada a ver un Club Deportivo con taquillas, duchas y toda clase de deportes todo junto en un mismo sitio y hasta un sauna, baño turco y un spa.
Solo los sitios más costosos de Argentina, tienen una cosa así y hasta por ahí nomas. Las primeras veces que fui, estaba tan maravillada, que quería probar todo: zumba, aquagym, sauna, baño turco y spa fue lo primero. Tienes un monitor que te va indicando lo que es lo mejor para ti. Yo super encantada de la vida.
Si deseas abandonar el hacer ejercicios
No te voy a mentir, si bien me encanta, a veces he querido abandonar poniéndome excusas, pero luego me dije: Viviana, si no lo haces por tu salud, ¿cuándo vas a hacerlo? Los huesos te pasarán factura, tu respiración de oxigenar el cerebro y pulmones te costará por tu asma y alergia. Así que, me propuse hacerlo al menos dos o tres veces a la semana.
Nunca es tarde para empezar
Chicas, nunca es tarde para empezar, tengas la edad que tengas. Si no has sido constante en darle alegrías a tu cuerpo, mente y espíritu, esta es la ocasión perfecta para comenzar.
Al principio, te agarrarán agujetas, pero luego, todo se acomoda y lo creerás necesario. Fíjate que tiene muchos beneficios moverte, como:
- Generas endorfinas, las famosas “hormonas de la felicidad” que te darán buen ánimo y lidiarás mejor con el estrés y la ansiedad.
- Mejora la oxigenación del cuerpo y con ello la salud cardiovascular.
- Ayuda a controlar el peso ya que quemas calorías.
- Contribuye a dormir mejor.
- Fortalece los huesos, lo que previene el avance de la osteoporosis.
- Mejora la flexibilidad, la fuerza y tonifica los músculos, lo que reduce dolores y previene caídas.
«No siempre amo el ejercicio, pero lo que siempre amo es el resultado»
Todo lo que te he explicado, suena como una excelente excusa para decidirte, ¿no crees?
Cuida y ama tu cuerpo, es el único lugar que tienes para vivir.
Aquí te doy unos tips que te ayudarán a comenzar tu propia rutina de ejercicios.
- Evalúa las preferencias que tienes para elegir: no hay una sola forma de mover el cuerpo. Caminar, nadar, bailar, practicar yoga, Pilates, Tai Chi, aparatos, aerobics, entre otros.
- Escoge algo que te guste: eso te dará entusiasmo para arrancar y constancia para seguir. Hará que lo sientas como un momento de placer dedicado a ti misma y no como una obligación.
- Convence a una amiga para ir juntas: el miedo a la primera clase es menor cuando es de a dos. Ir con alguien más genera también el compromiso de cumplir con la otra persona. Y, además, ir con una amiga seguro lo hará más entretenido.
- La gimnasia gratuita existe: puede que agregar un gasto extra a tu presupuesto, no sea una opción. Pero aún así se puede, por ejemplo: haciendo algo tan simple como salir a caminar. Otra posibilidad (pero debes hacerlo con cuidado), son los vídeos de ejercicios. Encontrarás miles en YouTube o en cable.
- Haz que se adapte a tus horarios: si tienes que hacer malabares para encajar el ejercicio en tu rutina, es probable que lo termines dejando. Haz el horario que más te convenga.
- Cerca es mejor: ya sea para una clase de baile o para caminar una hora, busca que el sitio elegido te quede a mano y te resulte fácil y rápido llegar.
- Ve a tu ritmo: pasar de nada a todo puede desanimarte. Si escoges caminar, la primera vez no puedes recorrerte la ciudad. Empieza de a poco, con objetivos realistas y acordes a tu estado físico. A medida que vayas entrenando, podrás aumentar la exigencia en tiempo o esfuerzo.
Conclusión
Estas frases que escribí en párrafos más arriba, son mi leit motiv de cada día, lo tengo pegado en mi tablero de visión, sobre la puerta de la heladera, y hasta en mi agenda, porque mi salud es fundamental. Hoy con 57 años que tengo, no puedo estar quieta en un sofá tirada dejando que mi cuerpo se endurezca como si mi edad me marcara un límite. No lo puedo permitir. Estoy segura, que si te lo piensas detenidamente, todos estos pasos que te he sugerido, no caerás en la pereza y decisión. Esto se llama Crecimiento del alma, cuerpo y espíritu. Ahora te toca ti, es cuestión de actitud.
Si te ha gustado este post, te invito a que comentes y compartas con alguien que lo necesite. Si deseas escribirme privadamente, puedes hacerlo a: contacto.glamouretstyle@gmail.com